LESIONES DEL PIE Y TOBILLO

ESGUINCES DE TOBILLO

Los esguinces de tobillo son causados por una torsión o fuerza anormal en el tobillo, lo que puede resultar en el estiramiento excesivo o desgarro de uno o más ligamentos en el exterior del tobillo.

Los síntomas principales de los esguinces de tobillo son dolor después de una torcedura o lesión, hinchazón y moretones.

El tratamiento incluye reposo y elevación del tobillo, además de la aplicación de hielo para reducir la hinchazón. También se pueden usar vendajes compresivos para inmovilizar y apoyar la lesión durante la curación. Los esguinces de tobillo graves, especialmente entre los atletas competitivos, pueden requerir cirugía para reparar y reforzar los ligamentos dañados.

Para prevenir los esguinces de tobillo, intenta mantener la fuerza, el equilibrio y la flexibilidad en los pies y tobillos mediante el ejercicio, el estiramiento y el uso de zapatos bien ajustados.

FRACTURAS DE TOBILLO

Una fractura es una ruptura parcial o completa de un hueso. Las fracturas en el tobillo pueden variar desde lesiones por avulsión menos graves (pequeños fragmentos de hueso que se han desprendido) hasta fracturas graves por fragmentación de la tibia, el peroné o ambos.

Las fracturas de tobillo son lesiones comunes que suelen ser causadas por el giro del tobillo hacia adentro o hacia afuera. Muchas personas confunden una fractura de tobillo con un esguince de tobillo, pero son bastante diferentes y, por lo tanto, requieren un diagnóstico preciso y temprano. A veces ocurren simultáneamente.

ROTURA DEL TENDÓN DE AQUILES

Una rotura del tendón de Aquiles es un desgarro completo o parcial que ocurre cuando el tendón se estira más allá de su capacidad. Saltos forzados o giros bruscos, o aceleraciones repentinas al correr, pueden sobrecargar el tendón y causar un desgarro. Una lesión en el tendón también puede resultar de una caída o tropiezo.

Las roturas del tendón de Aquiles se observan con mayor frecuencia en los “guerreros de fin de semana”, generalmente personas de mediana edad que practican deportes en su tiempo libre. Con menos frecuencia, enfermedades o medicamentos, como los esteroides o ciertos antibióticos, pueden debilitar el tendón y contribuir a las roturas.

ESGUINCES DE TOBILLO

Los esguinces de tobillo son causados por una torsión o fuerza anormal en el tobillo, lo que puede resultar en el estiramiento excesivo o desgarro de uno o más ligamentos en el exterior del tobillo.

Los síntomas principales de los esguinces de tobillo son dolor después de una torcedura o lesión, hinchazón y moretones.

El tratamiento incluye reposo y elevación del tobillo, además de la aplicación de hielo para reducir la hinchazón. También se pueden usar vendajes compresivos para inmovilizar y apoyar la lesión durante la curación. Los esguinces de tobillo graves, especialmente entre los atletas competitivos, pueden requerir cirugía para reparar y reforzar los ligamentos dañados.

Para prevenir los esguinces de tobillo, intenta mantener la fuerza, el equilibrio y la flexibilidad en los pies y tobillos mediante el ejercicio, el estiramiento y el uso de zapatos bien ajustados.

FRACTURAS DE TOBILLO

Una fractura es una ruptura parcial o completa de un hueso. Las fracturas en el tobillo pueden variar desde lesiones por avulsión menos graves (pequeños fragmentos de hueso que se han desprendido) hasta fracturas graves por fragmentación de la tibia, el peroné o ambos.

Las fracturas de tobillo son lesiones comunes que suelen ser causadas por el giro del tobillo hacia adentro o hacia afuera. Muchas personas confunden una fractura de tobillo con un esguince de tobillo, pero son bastante diferentes y, por lo tanto, requieren un diagnóstico preciso y temprano. A veces ocurren simultáneamente.

ROTURA DEL TENDÓN DE AQUILES

Una rotura del tendón de Aquiles es un desgarro completo o parcial que ocurre cuando el tendón se estira más allá de su capacidad. Saltos forzados o giros bruscos, o aceleraciones repentinas al correr, pueden sobrecargar el tendón y causar un desgarro. Una lesión en el tendón también puede resultar de una caída o tropiezo.

Las roturas del tendón de Aquiles se observan con mayor frecuencia en los “guerreros de fin de semana”, generalmente personas de mediana edad que practican deportes en su tiempo libre. Con menos frecuencia, enfermedades o medicamentos, como los esteroides o ciertos antibióticos, pueden debilitar el tendón y contribuir a las roturas.

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